viernes, 19 de septiembre de 2008

Pasado los pobres, presente los ricos

En un escrito anterior, hablé de la pena ajena que nos causaba un agente exterior, y hasta se inauguró una sección. Pero esta vez, será al contrario.

Alguna vez escribí otro post desafortunado (cómo escribo, por Dios) sobre la ridiculez de algunos, llamado “La Ridiculez nos llama”; he de admitir que es uno de mis primeros escritos en un Blog, y no encontraba una vertiente que me diera cierta disciplina en la escritura, así que la aspereza y crudeza están presentes. Pero a casi un año de dicho escrito, me encuentro con el mismo tema, pero con la consigna de meter en aprietos a todos y cada uno de nosotros.

El tema sigue siendo el mismo, la ridiculez. Por alguna razón, este tema es uno de los más recurrentes y ricos de finales del siglo XX y principios del XXI, tal vez tenga que ver con el aniquilamiento de la intimidad, como resaltó algún escritor por ahí, o tal vez porque sea nuestra verdadera naturaleza.

Pero dejémonos de ideas vagas y vayámonos a lo denso del tema. Es del vulgo popular decir que algunos recuerdos son heridas que no llegan a cerrar, y más cuando nos referimos a hechos dolorosos que impactaron nuestra vida. Esas heridas llegan a cicatrizar, pero algunas no dejan de doler, como aquel golpe que sufriste y que nunca se reparó, y que de vez en cuando te agobia. En eso no hay duda. Pero hay otras heridas, tal vez menores, que permanecen escondidas y que, después de un tiempo, nos damos cuenta de aquellas, y el dolor nos golpea. Sin embargo, existen otras, que no son heridas de momento, pero con el tiempo, cuando nuestro cuerpo crece, y también nuestro pudor e inteligencia, nos llegan a herir esas acciones, que para muchos, y para nosotros, no eran acaloramientos en ese entonces. Una prueba de este tipo de heridas son nuestros álbumes de fotos. El álbum llega a convertirse en la historia vergonzosa de nuestra vida. Llegamos a detestar ese compendio de desaguisados sin movimiento, hasta el punto de negar que seamos nosotros. Ha sido parodiado hasta el cansancio ese hecho vil, cuando la madre le muestra el álbum de fotos a la novia en cuestión. Esa parodia es un acto que resalta la crítica y el aborrecimiento colectivo que le tenemos al desfile grotesco de nuestras vidas.

Pero no dejemos ese ambiente, y ese ejemplo, porque de ahí nos colgaremos más adelante. La vergüenza es un acto, hasta cierto punto, intolerable, pues nos muestra con claridad nuestro grado de pudor, a la vez que nos muestra el grado de ridiculez que podemos manejar. Pero también es un acto de conciencia, pues la vergüenza nos hace pensar dos veces si se quiere hacer tal o cual cosa. A eso se le llama Arrepentimiento, y creo que la iglesia tiene mucho que decirnos al respecto de eso.

Volvamos con ese máquina del pasado y viajemos a lugares que nos son conocidos a todos, y burlémonos y juzguémonos para no volver a cometer tantas vergüenzas, para no hacer pasar malos momentos al Wilberth, Pedro, Alejandro, Julios del futuro.

Para poder hacer esta hazaña de viaje me valdré de un elemento que nos es conocido: la música, y para ilustrarlos mejor, haré uso del Youtube, que la hace, como dije antes, de elemento histórico.

El primer video es una muestra de lo perdido que estábamos en esos años noventas:


http://es.youtube.com/watch?v=obTyFXkuav0

Quisiera saber quién carajos no escuchó esta mierda. He de admitir que era un escucha empedernido en aquellos lejanos años. Pero espero que la consideración me sea oportuna, pues contaba con tan sólo 12 o 13 años. Pero lo que sí es imperdonable, es el wuey que bailó esta mierda. En mi caso, agradezco a Dios que me haya hecho torpe para el baile, además de inundarme de una pena inmensa para dejar de lado toda querella de danza. Sin embargo, tengo que juzgar con fuerza (es mi derecho) a los descerebrados que hicieron alarde de sus mejores pasos de baile en las “discos” (frase ochentera y noventera que quedó en desuso), al ritmo de un “Eh diu diue gogegi” (perdonen, pero no sé si es en Francés esa frase, así que me remitiré en Wuasha wuashar). Yordi estuvo a punto de convertirse en la voz de la juventud de aquellos inicios de los noventas. Pero desapareció. Estoy seguro que Dios nos mandó a su mejor ángel sicario, y se lo llevó al camino del homosexualismo y las drogas. Hay un video donde ya sale grandecito, y he de confesar que me dieron ganas de ir a Francia, romperle su madre y pedirle que me regresara la dignidad que me robó.

Otra canción que nos movió y llegó a convertirse en atemporal es la pegajosísima “I´m too sexy” de Right Said Fred (aún no sé si así se llama la banda, o así se llamaba el disco).

¿Quién no se ponía como loco al escuchar “i´m too sexy for my love, too sexy for my love, loves going to leave me”? yo no. Pero conocí a muchos que sí. A mí, esa canción me sonaba muy putañera, y mi prima Guadalupe me acusaba de envidioso, ya que decía que el vocalista era muy guapo, así como el resto de la banda (dos despistados más), pero le recriminaba que un poster sin movimiento, no te dejaba nada en claro. Que para saber si uno es puto, hay que verlo moverse, caminar y actuar. Ella no me creyó hasta que le mostré el video.


http://es.youtube.com/watch?v=ipZDG6__Zfc

Y así la callé. Por dios, no necesitaba llegar a tal extremo, con sólo ver la reacción que ocasionaba tal canción en los considerados machotes y bien delineados como hombres, en las fiestas y discos de ese entonces. Pero hay que admitir que al ver a esos machísimos con las “bajaditas” es muy confuso para una puberta. Y al final, esa canción se convirtió en el himno de los putitos.

Para terminar, y no fastidiarlos con mi escritura falaz, les hablaré de otro que marcó a muchos, por lo penoso que ha llegado a ser el decirse fan exprés de este mal denominado cantante: Vanilla Ice. ¿Lo recuerdan? Hasta él mismo llegó a decir que era una envidia, pues sacó un disco, se hizo famoso, se cogió a Madonna y se extinguió. Pero hay que regresar con nosotros. Quisiera saber quién carajos llegó, no sólo a comprar su disco o bailar sus canciones, sino a adoptar su look. Qué asco de recuerdo. Pobre de aquel que lo haya hecho. Lo compadezco. He de admitir que mi primo Carlos adoptó aquella facha de Guile rapero. Pero no sólo eso, sino algo peor viví de cerca. En mi familia hay una gran gama de especímenes, entre los cuales cuento con unos primos que se creían unos privilegiados de la danza popular, e hicieron gala de sus recursos para apantallar, según ellos, a cuanta “morrita”(otra palabra en desuso) hubiera en la “Disco”. Y sí, acertaron, esos primos bailarines son hermanos del anterior.

Pero veamos al esperpento de Vanilla Ice, y tiemblen aquellos pecadores que lo llegaron a adorar:


http://es.youtube.com/watch?v=Vp-is6S_b_g

Perdonen por no encontrar un video, que me comentó Eduardo, en donde Vanilla ice explica que él inventó el ritmo de Ice Ice Baby, y además hace la diferencia de los sonidos de su canción con la Under Pressure de Queen y Bowie con su boca. Pero es impagable la vez que todos se extasiaron cuando vieron a Vanilla Ice, mientras veían la película de las Tortugas ninja 2(otro icono de los noventas), y más al ver a nuestros héroes bailando a lado del güero rapero. Se nos hacía un acto sin precedentes. Y saliendo corrimos a comprar el soundtrack de la película ¿no?


http://es.youtube.com/watch?v=aFDtnm1tkvU

Abramos un paréntesis, para darle paso a un video de Pena ajena:


http://es.youtube.com/watch?v=dWZpoThryag

He de confesar que me sonrojado de pena al escribir este post, pues saca del baúl, anécdotas que tenía arrinconadas. Y creo que ustedes también se han apenado al leerlo. Pero ya me piqué así que pondré otro videíto para alargar este enorme Post. ¿Alguien Recuerda Milli Vanilli? Qué penosa mancha en nuestra memoria. Esto más atrás, a finales de los ochenta, principios de los noventas. Recuerdo que mi primo mayor (él tendría 18 años en ese entonces y yo 10) me hizo escuchar al afroamericano con rastas como mojones. Admito que la canción me hacia recorda, de alguna manera inexplicable, a las películas de “Viernes 13”. A lo mejor era ese eructo que se escuchaba justo cuando termina el verso “I'm in love with you girl …“, ese “Ahh”, tal vez, en mi enfermiza mente de niño, era lo que me hacía recordar a Jason. Pero no me gustaba dicha canción, ni mucho menos el grupo. Eso sucedió en un viaje a Chetumal, Quintana Roo, con mi madre. Ya saben, de esos viajes que se hacían y aún se hacen, para comprar cosas a mejor precio. Pues yo fui con mi santa madre, a la tierna edad de 10 años, y me compró un walkman, después de la odisea terrible que le ocasioné con mis súplicas y berrinches. Al final, me lo compró, pero sólo nos quedaba una hora para subir al camión y yo no tenía ningún casete para poder hacer buen uso de mi walkman, y cerca del camión había un señor con cientos de casetes grabados. Hice alarde de mi poder de convencimiento para poder conseguir, ahora, mi casete. Nos acercamos y el señor nos preguntó lo que buscábamos, yo callé viendo los títulos y buscando algo conocido en inglés, y a Michael Jackson. Después de un rato, mi madre se animó y compró uno de los éxitos de Juan Gabriel, y yo todavía dudaba. A la tercera pregunta del señor, yo le pregunté si no tenía alguno de éxitos en inglés, y me contestó “Claro que sí”, agarró un casete de Milli vanilli y me lo puso. Yo le dije que no, que quería otro con éxitos. El señor sacó otro casete, y lo puso y era Milli Vanilli, pero otra canción. Gracias a mi primo Hernán, sabía que era del mismo duo, y el señor me recriminó “¿pero si es lo que se está escuchando?”. Yo le pregunté si tenía algo de Michael Jackson, y junto con las prisas de mi madre, me dijo, “Claro que sí”, y me dio otro casete de “Éxitos Anglosajón”, así de mal escrito. Lo pagó mi madre, y nos fuimos. Cuando subí al camión, y cuando ya estábamos con las luces apagadas y a la salida de Chetumal, lo puse y cuál fue mi sorpresa de toparme con el casete de Milli Vanilli. Tuve que resignarme a escuchar a Juan Gabriel.


http://es.youtube.com/watch?v=GSqV3rWM4iQ

Así terminamos este post, con algunos videos y mierdas más, así como Locomía, New kids on the block, MC Hammer y de más guarradas. Pero para eso tendremos más tiempo y más post.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Que onda Will, oye veo que tienes tu gamertag de xbox a un lado del blog. Juegas Halo 3 en línea?? sí es así dime, para que te agregue como amigo y hechemos unas retas en un double o un team salayer. Soy muy bueno jugando. Contesta

Saludos

wilberth herrera dijo...

mussgo, sí, tengo el halo 3, tiene rato que no me conecto, pero sí le doy al botonazo. Claro, agrégame para echarnos unas retas. Antes de que lo venda para comprar mi silent hill 5.
Un saludo