Hoy invaden mi humanidad, dos sentimientos contradictorios. Son tan fuertes que estoy a punto de explotar o volverme loco. En primera, estoy contento, alegre, que va FELIZ, porque mis Acereros de Pittsburgh son campeones por 6ta ocasión, y se convierten en los más ganadores, por arriba de los putos Vaqueros (con toda su lana), el ilustre Green Bay, y los recordados con nostalgia 40ers. De San Francisco. Ayer fue un gran juego de Superbowl. De esos que se quedarán intactos en la memoria porque toda esa épica que recubre ese deporte, el verdadero rey de los deportes, se hizo presente como cada año. Qué final, qué jugadores, qué partido. Arizona fue un rival digno. Lástima que sólo Kurt Warner y su bolsa protectora estuvieron a la altura, y el resto quedó a deber.
Pero por otra parte, estoy que me lleva la madre. Estoy con un odio. Estoy Colérico (porque los griegos ponen la cólera por arriba del Odio), contra los pinches Spots que ponían a unos minutos que empezaba un partido de futbol. Desde el viernes, con el partido de Tecos-Cruz-azul, empezaron con esa faramalla. Sólo escuché al comentarista decir, “Ahora veremos un comercial sobre las elecciones. Lo siento”¡¡y apenas llevando 2 minutos de empezado el partido, y cuando Los Tecos estaban llegando al área!! ¡¡No lo podía creer!! Le recriminé a Tv Azteca por esa ociosa manera de restregarnos las campañas electorales, a los espectadores. Ya Tv azteca nos tiene acostumbrados a ponernos hosquedades así, además de sus repeticiones en momentos trascendentes en el partido. Pero era un partido, además eran los Tecos contra el Cruz azul, nada me perdía.
Vino sábado y yo con una calentura y una gripa que me tiraron a la hamaca por todo el día. Esperé por el partido de Monarcas vs América. Quería ver perder a las mentadas águilas. Todo estaba dispuesto, el partido por iniciar, las botanas, los refrescos (al tiempo porque estaba enfermito), y nuestro respectivo rollo de papel higiénico (pues para los mocos de la gripa que vino a reforzar la calentura). Inició el partido, monarcas tomó el balón y se fue furioso contra las águilas. Aplaudí ese ímpetu, cuando Martinolli mencionó “Ahora veremos un comercial sobre las elecciones. Lo siento”, y salió una pantalla que decía que abrían 5 minutos de comerciales electorales, mientras un rancherito quedaba sumergido en el dip de queso, debido a mi gargólica perplejidad. Lo volvieron hacer. “¡¡Hijos de su puta madre!!” grité, y mi madre celebró, porque pensó que yo había reaccionado así por un gol del América. Después de subir para burlarme, le aclaré el asunto.
No lo podía creer. Todos los partidos estarían así. El domingo lo vi con los partidos emitidos por Televisa. Así que me chuté todos los partidos con su respectivo comercial. El de Toluca-Pumas, el de Pachuca-Atlante y el medio tiempo del Santos-Puebla.
Estaba furioso por ese cometido. Pero estaba a la expectativa, pues iba a comenzar el superbowl, y como era un evento importante, no era posible que pusieran los comerciales del IFE en pleno partido. No podrían hacerlo. Qué poco conozco México. Pues se pasaron por los tanates la importancia e interrumpieron el Superbowl para poner sus chocantes comerciales. Eso es una falta de respeto al televidente y al público en general. No lo podía creer. Ví la primera mitad del partido (los dos primeros cuartos) y cuando se vino una reacción de Arizona, cuando el partido empezó a ponerse álgido y cuando el tiempo fuera de los dos minutos finales, cuando Arizona se disponía a anotar, interrumpieron la transmisión para poner un comercial del IFE. ¡Puta Madre! Nunca odié más la política como en ese momento. El encargado de recibir todo el repertorio de mis insultos fue Jesús Ortega con su comercial con esa niña pendeja y su Pri-va-ti-za-ción.
El resto del partido me lo chuté y no púde disfrutarlo totalmente al estar rezando porque no interrumpiera el IFE cuando llegara el final del partido.
Es una falta de respeto total ese acto. Ayer, el IFE declaró que buscará, hoy lunes 2 de febrero, una acción legal contra Televisa y Tv azteca, alegando “FALTA DE RESPETO a las Instituciones” el poner como interrupción, los comerciales dentro de programas como son los deportes. Miembros del IFE mencionan que nunca se acordó el meter los spots de la manera en que Tv azteca y Televisa lo hicieron. Hoy, Carlos Sotelo, presidente de
¡Bravo, Señor Sotelo! Me quito el sombrero. Es usted un chingón. Que revivan a Franco y a Mussolini.
La falta de respeto no fue a las instituciones, sino a los espectadores, porque nos obligan a ver sus spots y a votar. Creo que no somos ningunos niños que nos tienen que educar de esa manera. Si el respeto al derecho ajeno es la paz, el respeto a la elección de uno debe ser sumiso y sin miramientos. Uno vota como quiere votar y por quien quiere votar, y no debe de ser exacerbado y obligado a hacerlo.
El fin de semana fue un momento que describe la estupidez de la política mexicana. Porque si bien tenemos una democracia, los que la manejan son unos ignorantes primates que se dicen políticos por defender, ya sea una corriente ideológica o su dinero, pero que en el momento de ejercerla, no tienen la mínima idea de cómo hacerla.
Hay que copiarle a los que saben. A los gringos que tanto nos caen mal. Porque les apuesto lo que quieran, que ellos, jamás pensarían interrumpir la transmisión de un partido de futbol, para poner un spot electoral.
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